Un saludo a la gente que dice lo que piensa para agradar y a la que no dice lo que piensa para desagradar.
Un saludo a los que intentan engañarse a si mismos sin éxito, porque de ellos, es el reino de los espejos.
Un saludo a los que no juzgan, a los que intentan mejorar ellos primero, antes de pedir que mejoren los de al lado.
Un saludo a los que cuidan y miman lo esencial, a los que fuera de cualquier compromiso valoran lo que tienen y luchan por conservarlo.
Un saludo a los que no se quejan ni protestan, a los que no imponen sus manías y visten de insustancial todo lo que no tiene importancia, porque valoran la paz.
Un saludo a los hacen y dicen cosas, y adiós a los copian y repiten, para rehacer haciendo nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario