Pequeños peces escondidos,
en el mar de los sentidos,
los que pesco cuando escribo...
Dedicatorias desde el mar
destellos de un sol oscurecido
que ciega de no brillar.
No mereces si no cuidas el cristal,
delicadas piezas de bohemia...
a nadie engañan los descuidos,
ni los tropiezos, ni alaridos,
al caer rompe.
Antes que llegue el grito... añicos.
No gracias, no recompongas ni busques trozos,
nadie quiere un jarrón pegado,
los jarrones pegados no valen para nada,
solo de lejos parecen ser lo que ya no son
y no sirven como sirvieron
Creo que prefiero un jarrón nuevo,
quizás mañana me de cuenta
de que donde tenia el jarrón,
puedo poner otra cosa,
incluso nada
Qué más honesto que decirlo,
qué más sincero que admitirlo,
y al que no le guste que no mire...
Ni mantas para el frío...quiero
ni mantas... para el frío doy
Cuánto se equivocaba Gasset
con la copulación en la frase
no soy yo "y" mi circunstancia,
soy yo en mi circunstancia.
es el complemento de lugar y de peso,
también del lugar, y no de la culpa.
Sin adición, y preferiblemente, sin adicción a la carga.
El hielo y el fuego queman,
el hielo también me cura,
el fuego también me hiela
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