Qué dulces historias
las que cuentan las resacas,
qué alegre dolor que la cabeza te mata
que repite con eco, alguna risa, carcajada o lágrima.
Que breves suspiros se quedan en la garganta,
impresionante deshidratación la que te embarga,
qué memoria selectiva para la noches largas,
qué capacidad de resumen tiene mi amiga resaca
Es el malestar del "bienestado".
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